UNA HISTORIA
El terminó sus estudios de periodismo y estaba ansioso por hacer sus prácticas en un diario. Un amigo suyo habló con su jefa, la Editora General del periódico donde laboraba y como El quería escribir notas policiales, aceptó que vaya a realizar sus pinitos en la redacción.
El, llegó y conoció a la Editora la cual desde el principio le cayó muy bien. Congeniaron rápidamente. Las ganas de escribir y de ser todo un periodista, era su particularidad.
El, en esas cosas que brinda el destino, comenzó a ver a su jefa como una amiga.
El, la ayudaba en todo lo que podía. El, la escuchaba. El, la entendía. Ella, su jefa, le contaba que ya se iba a casar con su novio. Tenían más de cinco años de romance y ya estaban alistándose para casarse. Sin embargo, parecía que tenían problemas.
El, comenzó a frecuentar mucho a su jefa. Salían a almorzar, hablaban sobre la carrera, sobre el diario. El, la ayudaba y aprendía de ella. El, la admiraba. A El, le gustaba su liderazgo, sus buenos sentimientos, su profesionalismo. A El, comenzó a gustarle Ella.
Ella, parecía que también se había fijado en El.
El, se cercioró que Ella estaba de mal en peor con su novio.
Ellos coqueteaban. Ellos se miraban tiernamente. Ellos se escribían tiernas cartas. Ellos tenían barreras que romper.
Ella, aún estaba comprometida con el novio. El, tenía 22 años y ella 30. Ella, era la jefa y El, sólo el practicante. Ella era ya una mujer hecha y derecha. El, simplemente el mocoso empeñoso que soñaba con ser un gran periodista.
Sin embargo, como en la mayoría de historias donde hay una dosis de amor, los sentimientos vencieron a las adversidades.
Ella terminó su relación de años y su novio desapareció.
Ellos iniciaron su romance. El qué dirán no los vencieron.
Todos en el diario comenzaron a hablar. A chismosear. El, llegó a obtener un puesto en el archivo del periódico.
La gente que ya sabía lo que estaba ocurriendo, comenzó hablar de más. El, hizo callar a varios. El se mantenía fuerte ante todas las habladurías.
Uno de los gerentes que se enteró del romance parece que se escandalizó y quiso fastidiar. Un día lo llamó a El y le dijo que iban a bajarle el sueldo. El no lo aceptó y le dijo a Ella que se iba.
Ella fue al archivo para hablar con El. Ella le dijo que seguro el gerentilllo ya sabía lo de ellos y que lo hacía por molestar. El recogió todas sus cosas y le dijo: "Mejor me voy antes que te molesten a ti...". Ella lloró mucho. Le dijo: "¿Qué harás ahora?, este es un trabajo donde al menos te pagan...".
El estaba decidido. Sacó sus cosas y se fue.
Ellos siguieron su romance. El se esforzó mucho y el destino le brindó otros trabajos. Y hasta llegó a trabajar en otros diarios. Al parecer no llegó a ser un gran periodista. Sin embargo, hizo mucho periodismo.
Ella siguió en el diario. Llegó a ser Directora.
Ellos se casaron.
El ahora quiere ser un "gran documentalista". Y sueña con otros proyectos.
Ella sigue haciendo periodismo en otro diario.
El escribe este blog.
Ella ya no está a su lado.
El, llegó y conoció a la Editora la cual desde el principio le cayó muy bien. Congeniaron rápidamente. Las ganas de escribir y de ser todo un periodista, era su particularidad.
El, en esas cosas que brinda el destino, comenzó a ver a su jefa como una amiga.
El, la ayudaba en todo lo que podía. El, la escuchaba. El, la entendía. Ella, su jefa, le contaba que ya se iba a casar con su novio. Tenían más de cinco años de romance y ya estaban alistándose para casarse. Sin embargo, parecía que tenían problemas.
El, comenzó a frecuentar mucho a su jefa. Salían a almorzar, hablaban sobre la carrera, sobre el diario. El, la ayudaba y aprendía de ella. El, la admiraba. A El, le gustaba su liderazgo, sus buenos sentimientos, su profesionalismo. A El, comenzó a gustarle Ella.
Ella, parecía que también se había fijado en El.
El, se cercioró que Ella estaba de mal en peor con su novio.
Ellos coqueteaban. Ellos se miraban tiernamente. Ellos se escribían tiernas cartas. Ellos tenían barreras que romper.
Ella, aún estaba comprometida con el novio. El, tenía 22 años y ella 30. Ella, era la jefa y El, sólo el practicante. Ella era ya una mujer hecha y derecha. El, simplemente el mocoso empeñoso que soñaba con ser un gran periodista.
Sin embargo, como en la mayoría de historias donde hay una dosis de amor, los sentimientos vencieron a las adversidades.
Ella terminó su relación de años y su novio desapareció.
Ellos iniciaron su romance. El qué dirán no los vencieron.
Todos en el diario comenzaron a hablar. A chismosear. El, llegó a obtener un puesto en el archivo del periódico.
La gente que ya sabía lo que estaba ocurriendo, comenzó hablar de más. El, hizo callar a varios. El se mantenía fuerte ante todas las habladurías.
Uno de los gerentes que se enteró del romance parece que se escandalizó y quiso fastidiar. Un día lo llamó a El y le dijo que iban a bajarle el sueldo. El no lo aceptó y le dijo a Ella que se iba.
Ella fue al archivo para hablar con El. Ella le dijo que seguro el gerentilllo ya sabía lo de ellos y que lo hacía por molestar. El recogió todas sus cosas y le dijo: "Mejor me voy antes que te molesten a ti...". Ella lloró mucho. Le dijo: "¿Qué harás ahora?, este es un trabajo donde al menos te pagan...".
El estaba decidido. Sacó sus cosas y se fue.
Ellos siguieron su romance. El se esforzó mucho y el destino le brindó otros trabajos. Y hasta llegó a trabajar en otros diarios. Al parecer no llegó a ser un gran periodista. Sin embargo, hizo mucho periodismo.
Ella siguió en el diario. Llegó a ser Directora.
Ellos se casaron.
El ahora quiere ser un "gran documentalista". Y sueña con otros proyectos.
Ella sigue haciendo periodismo en otro diario.
El escribe este blog.
Ella ya no está a su lado.
5 comentarios
cecica -
Mia -
cecica -
Mia -
cariñitos para el alma Manuelon :)
Leuzor -